Our social:

lunes, 6 de febrero de 2017

Billy al piano

Ilustración de Robert McGinnis
Portada de la novela de P. Robe, Murder me for nickles (1960)
Fue un buen año, aquel 73. Entre otras muchas cosas, por aquella canción de Joel. A pesar de ser una de sus "habituales" en los conciertos, su estreno pasó más bien desapercibido, y no fue hasta el año 77 que comenzó a gozar de una mayor popularidad. La revista Rolling Stone la seleccionó como una de las 500 mejores canciones de todos los tiempos (un moderado 429º puesto que no le hace demasiada justicia).

La canción nos sitúa en un bar, donde "Billy" (el protagonista de la canción, no el autor) toca el piano. Es un fracasado, y el bar donde toca (y bebe y fuma) está lleno de fracasados. Y sí, podemos decir que es una canción autobiográfica. Billy (ahora sí, el autor de la canción), tras el fracaso de su anterior álbum, Cold Spring Harbor (1971), se había estado ganando la vida como cantante en un salón. Intervalo en el que se sobrepuso al fracaso, y firmó con Columbia la grabación de su segundo disco, de título homónimo a la canción que nos ocupa, y que a pesar de una acogida discreta, iba a impulsar su carrera. Con The stranger (1977), ya no quedaba ninguna duda: Billy Joel estaba destinado a ser uno de los grandes de las próximas décadas.

Las letras de sus canciones parecen sacadas de un diálogo, su falta de pulimento denota la torpeza de Joel con el texto. De ahí que la fuerza melódica de sus canciones deba suplir esta carencia.

Os dejo con el vídeo original y mi traducción de las letras, espero que acertadas.


Piano man, por Billy Joel (1973)

It's nine o'clock on a Saturday
the regular crowd shuffles in
There's an old man sitting next to me
Makin' love to his tonic and gin
He say, son can you play me a memory
I'm not really sure how it goes
But it's sad and it's sweet and I knew it complete
When I wore a younger man's clothes

Sing us a song, you're the piano man
sing us a song tonight
Well, we're all in the mood for a melody
And you've got us feeling alright

Now John at the bar is a friend of mine
He gets me my drinks for free
And he's quick with a joke or to light up your smoke
But there's someplace that he'd rather be
He says Bill, I believe this is killing me
As the smile ran away from his face
Well I'm sure that I could be a movie star
If I could get out of this place

Sing us a song, you're the piano man
sing us a song tonight
Well, we're all in the mood for a melody
And you've got us feeling alright

Now Paul is a real estate novelist
Who never had time for a wife
And he's talking with Davy who's still in the navy
And probably will be for life
And the waitress is practicing politics
As the businessmen slowly get stoned
Yes, they're sharing a drink they call loneliness
But it's better than drinking alone

Sing us a song, you're the piano man
sing us a song tonight
Well, we're all in the mood for a melody
And you've got us feeling alright

It's a pretty good crowd for a Saturday
And the manager gives me a smile
Because he knows that it's me
they've been coming to see
To forget about life for awhile
And the piano sounds like a carnival
And the microphone smells like a beer
And they sit at the bar
and put bread in my jar
And say "Man, what are you doing here?"

Sing us a song, you're the piano man
Sing us a song tonight.
Well, we're all in the mood for a melody
And you've got us feeling alright

Son las nueve de un sábado,
la clientela habitual entra arrastrándose,
hay un viejo sentado a mi lado,
haciéndole el amor a su gintonic.
Él dice: hijo, ¿me puedes tocar un recuerdo?
No estoy muy seguro de cómo suena,
pero es triste y es dulce, y me la sabía entera
cuando llevaba una ropa más juvenil.

Cántanos una canción, eres el hombre del piano,
cántanos una canción esta noche.
Todos estamos animados para una melodía,
y tú logras que nos sintamos bien.

Ahora John en la barra es un amigo mío,
me consigue bebida gratis,
y es rápido con un chiste, o para encenderte el pitillo.
aunque preferiría estar en otro lugar.
Me dice: Bill, creo que esto me está matando,
mientras la sonrisa desaparece de su cara,
Seguro que yo podría ser una estrella de cine,
si pudiera salir de este sitio.

Cántanos una canción, eres el hombre del piano,
cántanos una canción esta noche.
Todos estamos animados para una melodía,
y tú logras que nos sintamos bien.

Ahora Paul es un novelista agente inmobiliario
que nunca tuvo tiempo para casarse,
y está hablando con Davy, que aún está en la Armada,
y seguramente seguirá ahí de por vida.
Y la camarera está practicando política,
mientras el empresario se emborracha.
Sí, comparten una bebida que se llama soledad,
pero es mejor que beber solo.

Cántanos una canción, eres el hombre del piano,
cántanos una canción esta noche.
Todos estamos animados para una melodía,
y tú logras que nos sintamos bien.

Está abarrotado para ser un sábado,
y el gerente me echa una sonrisa,
porque sabe que es a mí 
a quien han venido a ver,
para olvidarse de la vida durante un rato.
Y el piano suena como un carnaval,
y el micrófono huele a cerveza,
y se sientan en la barra 
y ponen propina en mi bote,
y dicen: tío, ¿por qué estás aquí?


Cántanos una canción, eres el hombre del piano,
cántanos una canción esta noche.
Todos estamos animados para una melodía,
y tú logras que nos sintamos bien.



2 comentarios:

  1. No puedo evitarlo, ese ambiente decadente tratado desde el prisma de la belleza melódica me llega... Gracias, Enrique

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De nada. Hay belleza en la destrucción, qué duda cabe.

      Eliminar